Es
el clásico restaurante de playa, sin mayor pretensión y con muchos comensales.
Vas
a encontrar los clásicos cocteles de mariscos, las pescadillas, chilapitas de
marlín, tacos de camarón, jaibas guisadas y gratinadas.
Como
íbamos bastante hambrientos, de entrada pedimos las pescadillas y las
chilapitas de marlín. Nos duraron medio segundo, seguimos con las jaibas loccas
y un queso fundido con camarones que no tiene abuela. Por cierto, ahí hacen las
tortillas al momento. Esto lo puedes aderezar con tres diferentes salsas y
chiles habaneros en vinagre. Ya entrados, también pedí una tostada de jaiba,
que viene guisada con jitomate e ingredientes secretos que los egoístas no me quisieron
describir. En nuestro pedido, se incluyó también un filete de pescado
empanizado (te lo preparan al gusto) y un coctel Vuelve a la Vida que estaba
fresquísimo.
Es
un platillo que combina mariscos con la tinta de calamar en un sabor tan
delicado que merecería estar incluido en los grandes restaurantes
especializados en productos del mar. Pero hasta el momento solo la sirven ahí.
También
nos echamos unas Cheladas y Clamatadas que acompañan perfectamente estos
platillos.
También
me enseñaron (ya no podía yo comer más) Su Brocheta de camarones en salsa de
mango que se veía excelente. Su Mousse de Salmón es otro pendiente así como su
crema de langosta.
Por
los precios ni se preocupen, ya les platiqué lo que comimos y la cuenta no pasó
de $650.00 Pesotes.
Mis
amigos Tamara y Jorge me lo recomendaron. Gracias a ellos ahora voy a tener que
regresar a la Jaiba Locca cada vez que vaya a Acapulco y ahora si le pregunto a
Jorge (mi asesor Jaibo Locco) antes de lanzarme a pedir.
¡Vive!
¡Disfruta! ¡Comparte!
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