La tradicional cena navideña incluye pavo,
romeritos, bacalao, ensalada de manzana, jamón y a veces una pierna de puerco, aunada
a monumental botaniza de la que traen los invitados para “no llegar sin nada”.
Luego les platico de la beberecua.
Yo me pregunto: ¿Por qué la
limitación? No se podrá incluir unas tortas de milanesa, un buen trompo de
tacos al pastor, carnitas con todo y buche, un arroz a la mexicana con pollo,
un fideo seco a los 3 chiles o un pozole….
No hay que ser. Piensen también en los
antojos nacionales.
Además cada cocina mexicana que se
prepara para recibir entre 15 y 20 invitados, prepara de estos guisos en
cantidad como para 75 personas. Esto ya es abuso, durante varios días
posteriores a la cena, voy a comer pavo en tacos, tortas, enchiladas, ensaladas
y hasta en tinga, va a haber tortas de bacalao para desayuno y cena, seguro con tacos de romeritos, rollitos de
jamón y sin dejar de incluir la pierna recalentada en múltiples formatos.
Ya se, ya se…. Que el recalentado es
buenísimo, que mi abuelita lo sazonó, que solo es una vez al año, que luego no
hay bacalao y así muchos argumentos que pudieran ser válidos si yo estuviera de
acuerdo con ellos. Rebatámoslos:
Si el recalentado es buenísimo, ¿Por
qué no lo cocinan un día antes? Y en cantidades coherentes para que se acabe en
la cena. A mi me gusta la comida recién hecha. Recalentada, según mi muy
humilde opinión, pierde mucho del sabor y sazón original….. Ya me han dicho que
estoy loco y no se nada de cocina.
Que mi abuelita lo sazonó: Vamos a
decirle que nos pase la receta y si es díscola, la grabamos a traición mientras
cocina y para molestarla, subimos la receta a Neurótica TV. Resuelto.
Solo una vez al año….. ¡Si chucha! Una
semana después en la cena de fin de año, te repiten la dosis con su también
repetida de recalentados. Que no los engatusen.
Habemos los que nos gusta la pierna
(de todo tipo, en especial la femenina), a los que nos gusta la ensalada de
manzana, el pavo y otros platillos
navideños. Pero para una cena, no durante 15 días seguidos, hay que variar o el
gusto se puede atrofiar.
A Eddy mi cuñado, no se le da la cena
navideña (no tengo idea porque le dicen así, uno se lo imagina así como
flaquito y chiquito, pero está grandote, peludo y tiene suficiente tamaño para
que le digan EDUARDO). Él está más
preocupado que yo, pero ya tiene un plan macabro antiplatillosnavideños al cual
estoy meditando unirme……… A las 8:00 PM del 24 de diciembre, 2012 y antes de
llegar a la reunión familiar, nos vamos a cenar Tacos al Pastor y en la reunión
decimos que estamos a dieta, que solo comeremos postre.
Me gusta la idea, así al día siguiente
probamos el recalentado y lo criticamos sin piedad en la intimidad de nuestras
casitas y en pijama.
Por cierto, según mis investigaciones
culinarias, el recalentado lo inventó una tataratatarabuela que yo tenía allá
por Michoacán, que había trabajado como burro para la cena y al día siguiente
con una flojera tamaño caguama dijo:
¿Ya probaron el recalentado? Sabe
mucho mejor que recién cocinado…. Todos se la creyeron.
¡Vive! ¡Disfruta! ¡Comparte!
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